lunes, 15 de diciembre de 2008

¿Aprendemos de la naturaleza?

La huella ecológica de la población humana es, en la actualidad, un 20% mayor que la superficie de nuestro planeta,lo que supone un evidente sobreconsumo de los recursos existentes y, por lo tanto, una degeneración progresiva de nuestro hábitat.

En 1998 el Swiss federal Institute of Technology de Zurich enunció, por primera vez, el conocido programa 2000-watt society, iniciándose, en el año 2001, una experiencia piloto en la región metropolitana de Basilea, que en la actualidad trata de hacerse extensiva a todo el territorio federal.

El objetivo del programa 2000-watt society es la reducción del consumo medio de cada persona a 2.000 vatios anuales antes del año 2050, sin que ello suponga una reducción drástica del estandar de vida, teniendo en cuenta que, en la actualidad, un ciudadano europeo consume una media de 6.000 vatios, mientras que uno norteamericano consume una media de 12.000 vatios.
Parece que éste es un programa utópico, pero es absolutamente viable de acuerdo con los científicos suizos al cargo del mismo, que demanda una transformación total de los recursos de cada territorio,mediante un incremento radical de los sistemas de producción de energías renovables.
Pero sobre todo 2000-watt society reclama una transformación en los hábitos energéticos individulaes, empresariales y públicos.
La construcción, como cualquier otra actividad de los seres humanos, ha de asumir su parte de responsabilidad en la consecución de este objetivo, y , por tanto, la arquitectura como fenómeno colectivo no puede quedarse fuera de este problema global.


Cúpula de la Energía, Soria

La arquitectura de hoy, debe asumir como necesarias cuestiones la optimización formal y constructiva, la limitación de la demanda energética, el uso de los sistemas pasivos, el aprovechamiento de las energías renovables, la recogida y reutilización del agua de lluvia, la utilización de materiales limpios, el reciclaje y la optimización de los procesos durante la construcción.


Cúpula de la Energía, Soria

Pero sobre todo es misión de la arquitectura el contribuir a la creación de patrones de comportamiento individuales que asuman la reducción del consumo y de los residuos como objetivo colectivo prioritario de nuestra sociedad.


Noticia e imágenes obtenidas de: ArquitectuaViva

1 comentario:

Mar Montes dijo...

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